Marina Núñez del Prado Viscarra
(1910 - 1995)

“(...) en América Latina, Marina Núñez del Prado es la única escultora

que ha trascendido a la celebridad universal”

Fueron las palabras escritas por el reconocido narrador, ensayista y dramaturgo boliviano Raúl Botelho Gosálvez, en la introducción del catálogo Escultura promovido por el italiano Alfredo Bonino, dueño de la reconocida “Galería Bonino” en la década de 1960 (Oporto, 2022).

Escultora y maestra, nació en La Paz un 17 de octubre de 1910. Vivió su infancia y parte de su adolescencia en el conocido barrio de Sopocachi de aquella ciudad, donde recibió clases particulares y tuvo un temprano acercamiento al arte, música y la pintura. Entre 1927 y 1930 estudió en el Conservatorio Nacional de Música y en la Academia Nacional de Bellas Artes. Según la propia Marina Núñez del Prado: “fue en el tercer año de estudios en la Academia de Bellas Artes, cuando decidí ser escultora. Sentía gran fascinación por la forma, sentía que los volúmenes y las formas serían el lenguaje para expresarme, sabía que la escultura absorbería todas mis energías” (El Aparapita, 2022:3). Al finalizar sus estudios se convertiría en la primera mujer maestra de la Academia, ejerciendo la docencia entre 1930 y 1938.

Posteriormente, realiza una serie de viajes a Perú, Uruguay y Argentina, presentando sus obras. En 1940 obtuvo la Beca Latinoamericana de la Asociación de Mujeres Universitarias para estudiar en la Art Students League, viajando a Nueva York-Estados Unidos donde permaneció alrededor de nueve años. A su retorno abrió una muestra permanente de sus obras en su casa de Sopocachi, que se mantiene hasta la actualidad. Contrajo nupcias, a los 64 años de edad, con el escritor peruano Jorge Falcón Garfias mudándose a Lima-Perú. Fallecería en esta ciudad el 9 de septiembre de 1995.

María Núñez desarrolló su arte, sus esculturas, en una época en transformación, un periodo que combinaba un ambiente y deseo de imitación de lo Europeo —percibido como superior, civilizatorio, moderno— y un emergente ambiente y deseo por proyectar lo propio, de recuperación de lo boliviano; encarnado en una nueva e inquieta generación de jóvenes que veían transformar su realidad, con la revolución mexicana (1910) como ejemplo de revalorización de lo ancestral y de emancipación, y una Guerra del Chaco (1932-1935) donde, en palabras de René Zavaleta Mercado, se gesta una conciencia nacional.

La artista describió su tiempo de la siguiente manera: “Los artistas hacían culto de las escuelas y los estilos venidos de Francia. Era una herejía volver los ojos hacia lo auténticamente nuestro (…) En escultura usando la técnica del modelado copiábamos casi siempre figuras clásicas en ‘yeso’ (…) Yo me he formado un concepto de mi paisaje y de mi raza, y mi obra quiere ser ese lenguaje lleno de sonoridad cósmica (…) Para mi el material predilecto es la piedra densa. El mensaje de Bolivia lo siento en materiales duros y eternos como el basalto y el granito; las luces y sombras de los basaltos pulidos me emocionan. Para interpretar [la fuerza telúrica de] los Andes, yo no siento otro material que la piedra” (Gómez, 1988:45-95 y 197).

La extensa y grandiosa obra de Núñez del Prado transitó por diversas etapas, algo propio de los artistas. “(…) En su etapa formativa, el primer período de su creación está caracterizado por emplear en sus obras la temática musical (…). Durante su estadía en los Estados Unidos inicia el segundo período, que se identifica por su acercamiento al tema social boliviano, en el que se hace eco de los conflictos que afectan al país, entre ellos la masacre de mineros de 1943 (…). El tercer período destaca por su incursión en la escultura en piedra tridimensional, también conocida como el período ‘maternal’, debido a las representaciones de madonas aymaras indígenas. Por último, el cuarto período es el neoabstracto, influenciado por su amistad con artistas que cultivaron el abstraccionismo” [sic] (Oporto, 2022).

De manera específica, en lo que se refiere a la representación de la mujer en su producción escultórica, se puede decir que “transitó entre las temáticas de ‘maternidad’, ‘naturaleza’ y la ‘sexualidad’, que son relevantes para reflexionar sobre los roles sociales de las mujeres bolivianas y, en definitiva, latinoamericanas, de la primera mitad del siglo XX” (Mazza, 2018:76).

Mencionar las exposiciones y premios logrados por la afamada escultora boliviana sería muy extenso, sin embargo, se puede mencionar que en total alcanzó 61 exposiciones, la primera a la corta edad de 20 años, y se tiene registro de al menos 133 obras en diferentes materiales. En cuanto a los premios, por mencionar algunos, Medalla de Oro en la Exposición Internacional de Berlín (1938), Primer Premio de Escultura-Medalla de Oro con su obra ‘Mineros en rebelión’ (1946), actualmente se encuentra en el Hall de la Corporación Minera de Bolivia, el Premio Anual de Escultura (1956) y el Gran Premio de Escultura (1960) otorgado por el Salón Pedro Domingo Murillo y el Cóndor de Los Andes (1954).

Entre algunas de sus obras se cuenta Madona, Princesa Inca, Aymara, Danza Huaca-Tokoris, Danza de las Cholas, Danza de los Cóndores, Autorretrato (1945), homenaje al escritor chuquisaqueño Gregorio Reynolds (1950), India (1951), Cóndor (1968), Los Andes (1963).

Bibliografía
Blanco, E. (Edit.) (2022). El Aparapita. Cargador de la memoria cultural de Bolivia. Museo de Aparapita. N° 19.

Gómez, J. (1988). Bolivia. Un pueblo en busca de su identidad. La Paz: Los Amigos del Libro.

Mazza, G. (2018). Representações da mulher na obra de Marina Núñez del Prado (1908-1995). História e Cultura, Franca, v. 7, n. 1, p. 75-101, jan-jul. 2018.

Oporto, L. (11 de julio de 2022). Un catálogo singular: “Esculturas de Marina Núñez del Prado”. La Época.

Personaje

RECURSOS MULTIMEDIA

Gómez, J. (1988). Bolivia. Un pueblo en busca de su identidad. La Paz: Los Amigos del Libro. Disponible en: https://archive.org/details/boliviaunpuebloe0000gome/mode/2up

Mazza, G. (2018). Representações da mulher na obra de Marina Núñez del Prado (1908-1995). História e Cultura, Franca, v. 7, n. 1, p. 75-101, jan-jul. 2018. Disponible en: https://dialnet.unirioja.es/descarga/articulo/6566942.pdf

El Cincel de Marina (Fundación Cultural Banco Central de Bolivia). http://www.fundacionculturalbcb.gob.bo/museo-marina/index.html

Blanco, E. (Edit.) (2022). El Aparapita. Cargador de la memoria cultural de Bolivia. Museo de Aparapita. N° 19. Disponible en: https://www.ahoraelpueblo.bo/wp-content/uploads/2022/03/APARAPITA-13-OK-OK.pdf

Oporto, L. (11 de julio de 2022). Un catálogo singular: “Esculturas de Marina Núñez del Prado”. La Época. Disponible en: https://www.la-epoca.com.bo/2022/07/11/un-catalogo-singular-esculturas-de-marina-nunez-del-prado/